domingo, 24 de julio de 2011

Que difícil...

Que difícil añorar.  Que difícil la soledad. Que difícil la distancia. Que dificil no gritar. Que difícil esperar. Que difícil entender pero no compartir. Que difícil saber. Que dificil callar. Que difícil  no dudar. Que difícil querer  abrazar y no poder.  que dificil exigir. Que dificil dar. Que difícil hacerte entender. Que difícil no preguntar. Que difícil hablar. Que difícil amoldarse.  Que dificil  romper muros. Que dificil unir caminos.  Que dificil saber cuando me necesitas. Que dificil cuando no me necesites.  Que dificil no compartir. Que dificil ser leal. Que dificil estar. Que dificil no estar. Que dificil comprender. Que dificil  crecer. Que dificil es querer.  Que dificil es demostrarlo.


La dificultad hace bella la amistad. La dificultad hace fuerte las convicciones. La dificultad  nos enseña amar.

Puzzle


Todos tenemos nuestro puzzle que construimos poco a poco desde que nacemos. Hay muchas piezas y desconocemos su  dibujo final. Es la gracia que tiene. Aunque  a veces la incertidumbre es difícil de sopesar, vamos juntando piezas poquito a poco. A veces no encajan aunque nos empeñemos, otras hay que deshacer lo hecho por que no llevan  a ninguna parte.  Hay piezas que ayer encajaban que mañana no lo harán. Descubriremos piezas que ni sabíamos que teníamos, otras que  aunque parezca que se separan, acabaran uniéndose con más firmeza. Algunas las perderemos y otras nos acompañaran siempre.

Son  miles de piezas y opciones, tantas que marean. Pero hay tiempo! No hay que desesperar, ni tener temor. Vive, decide, construye.  Piensa que si nos equivocamos siempre podemos volver a empezar. Así acabaremos creando  nuestro puzzle. Cada  uno es único y solo nosotros decidimos su forma, tamaño, y dibujo.